Pandillas en El Salvador


Lic. Samuel Arias
Corresponsal de Cadena Telemundo

A lo largo de los años, el fenómeno de las pandillas en El Salvador ha ido transformándose hasta llegar a un nivel de complejidad y violencia que parece haberlo convertido en un fenómeno sin solución. Si bien este proceso de transformación es consecuencia de la interacción de una serie de factores, es importante recalcar que el recrudecimiento general de la violencia social en El Salvador en la época de post-guerra y la falta de capacidad del Estado para evitar esa aceleración de la violencia y la criminalidad, han generado condiciones que han posibilitado su evolución. Los cálculos sobre la cantidad de integrantes de pandillas son muy variados, desde unos pocos 25.000 hasta la considerable cifra de 300.000 pandilleros activos en Guatemala, El Salvador y Honduras. Las dos pandillas juveniles más conocidas de América Central son la de Mara Salvatrucha y la pandilla de la Calle 18. Estas dos pandillas se formaron con inmigrantes centro-américanos en Los Ángeles, desde allí, volvieron para diseminarse en América Central.
30 de abril de 2009

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¿Qué es el Centro Cultural One Way?

Para nosotros, hacer cultura es el deseo de dar un juicio a la realidad, un juicio que sea el resultado de un diálogo entre nosotros y el público. Y es que cultura es el interesarse por todos los acontecimientos y por toda la realidad, no hacerlo sería como desinteresarse del mismo hombre.

Sin embargo, para juzgar es necesario tener clara la propia identidad, saber lo que es el fundamento de todo, y preguntarse qué le da un sentido a todo el actuar.

Por esta razón nace “One Way” (el único camino), porque consideramos que el único camino por el cual vale la pena vivir y actuar es el hombre. Vivir y actuar en función de él.

Fue así como decidimos iniciar un trabajo juntos, con el cual construir lugares de verdad, empeñándonos en un trabajo educativo y cultural que contribuya a formar hombres nuevos. En este sentido, se nos presentó la cuestión sobre cómo llevar a cabo esta labor, pues estábamos conscientes de que nos hacía falta madurar y crecer. Sin embargo, pensamos que este crecimiento no puede ser algo que preceda a la acción y sobre todo no puede ser algo privado o circunscrito a pocos. Todo lo contrario, es posible crecer en un actuar de forma nueva dentro de la sociedad, iniciando en ella un diálogo sincero.